DÍA 15 : CRUCERO POR EL RÍO LI- YANGSHUO.

A las 7:00 horas de la mañana suena el despertador, en este viaje a China estamos madrugando mucho !!!
Hoy tomaremos un crucero por el río Li hasta llegar a Yangshuo, donde pasaremos el resto de la tarde visitando el centro de la ciudad.

El crucero dura aproximadamente cuatro horas y cuando llegas a Yangshuo tienes la posibilidad de quedarte allí como hicimos nosotros, o volver en autobús a Guilin en aproximadamente una hora y media con un incluido en el precio de la excursión.

A las 8:00 horas estamos sentados en recepción esperando a que pasen a recogernos para llevarnos en autobús hasta el puerto desde donde partirá el crucero, el trayecto dura unos 30 minutos. Al llegar al embarcadero vamos siguiendo a nuestro guía y nos lleva hasta la que será nuestra mesa durante el crucero. Nos ofrecen un té de bienvenida y unos minutos después de las 9:00 el barco se pone a navegar.


Tenemos mucha suerte porque el día está muy despejado y la temperatura es agradable.
Nada más partir comenzamos a ver los peñascos rocosos cubiertos de vegetación y decidimos subir a la cubierta para hacer fotos.



En todos los reportajes que habíamos visto en televisión sobre China estaban estas montañas que bordean el río, y en nuestra memoria se quedarán gravadas para siempre, el paisaje es precioso !!!


Hay momentos en que las montañas las vemos de lejos, pero hay otros tramos en los que el barco pasa tan cerca de ellas que parecen mucho más impresionantes.




El tiempo  pasa rápido con tanto paisaje pero no nos queremos descuidar porque sabemos que sobre las 11:30 horas vamos a pasar por un paraje donde es típico fotografiarse con un billete de 20 yuanes ya que en este billete encontramos representado este paisaje.



Después dejamos la cubierta del barco para ir a comer, comida típica china, nos lo sirvieron en una bandeja y todo estaba rico.

Ahora con el estómago lleno sentimos un poco de sueño y nos hacemos los remolones, intentamos vencer a la pereza y regresamos a la cubierta para seguir admirando el paisaje al aire libre.




Por el río también se puede navegar en unas barcas de bambú típicas, nos lo ofrecieron también en el hotel, el precio es bastante más económico, pero el recorrido también es bastante más corto.


En general este crucero por el río Li nos ha gustado mucho, se lo recomendamos a todos los que visitan la zona, sabemos que es un poco caro pero merece la pena.

Sobre las 14:00 horas llegamos a Yangshuo, somos muy pocos los turistas que llevamos equipaje, intuimos que el resto regresará en breve a Guilin en autobús. Nosotros nos adentramos en las calles de Yangshuo siguiendo la marea china y atravesando los muchos puestos de souvenirs y comida.

Nos alejamos del embarcadero siguiendo las indicaciones del GPS hasta el hotel. Aunque nos ofrecieron transporte para llegar, decidimos ir caminando.
El hotel es sencillo pero muy bien situado para visitar la ciudad, estamos en la zona más bulliciosa de Yangshuo.

Descansamos un poco y salimos nuevamente para dar una vuelta por esta turística ciudad, todo el centro está lleno de restaurantes, agencias de turismo y tiendas de souvenirs.

Comenzamos la visita un poco alejados del centro, nos vamos hacia la zona del río donde a estas horas el sol comienza a caer y la tranquilidad se apodera del ambiente ...






Nos vamos hacia las calles más céntricas donde a estas horas las luces y el bullicio envuelven la ciudad, sin duda esta es la ciudad con más turistas que nos hemos encontrado en el recorrido por China.

En principio cuando decidimos quedarnos en esta ciudad era para alquilar una bici y visitar con ella las orillas del río, actividad muy demandada, pero a estas alturas de circuito ya estamos bastante cansados y lo descartamos, preferimos dedicarnos a visitar tranquilamente la ciudad y sentarnos a degustar alguna de las muchas ofertas gastronómicas que ofrecen los restaurantes.




No nos arrepentimos de habernos quedado sin excursión en bicicleta, pero tampoco desanimamos a nadie a que lo haga, sobre todo si se viene cuando los días son largos, sin duda la zona está llena de montañas y merece la pena descubrirlas...
A cambio hemos pasado una divertida tarde donde hemos aprovechado a comprar algún regalo y darnos un relajante masaje antes de cenar.




Satisfechos por el día tan bueno que hemos pasado, nos retiramos a descansar.



DÍA 14: FENGHUANG - GUILIN.

Hoy no hemos madrugado demasiado, el autobús que sale de la estación de Fenghuang con destino a Guilin es a las 11:00 horas.

Después de desayunar recogimos nuestro equipaje y cuando fuimos a entregar la llave de la habitación, la señora de recepción tuvo el detalle de darnos un regalo, una cajita que tenía varias bolsas de caramelos, muy agradecidos ...

Como es temprano decidimos ir caminando hasta la estación. El camino nos lleva unos 25 minutos.
Compramos nuestros tickets para ir a Guilin y esperamos a que se llegue la hora.


La verdad es que el día de hoy lo hemos pasado prácticamente en el bus, el viaje se ha hecho muy largo a pesar de que los asientos son cómodos y se reclinan casi haciéndose cama.

Cuando llevamos unas tres horas de viaje paramos en un área de servicio para ir al baño y poder comprar algo para picar, ya que no hay restaurante para comer.

Hacemos una segunda parada cuando queda una hora de viaje para llegar a Guilin y por fin sobre las 17:00 horas llegamos a la Qintan Bus Station.

Intentamos coger un taxi oficial, pero lo único que encontramos es un habitante local que se ofrecía a llevarnos hasta el hotel a un precio que no nos convenía, por lo que cogimos nuestras mochilas y teléfono en mano vamos siguiendo el GPS hasta llegar caminando.

En recepción además de hacer el check-in, nos informamos sobre los cruceros por el río Li, y después de elegir el que más nos gusta, lo dejamos contratado  para el día de mañana.
El precio es de 380 yuanes por un crucero de unas 4 horas con comida a bordo.

Descuidados por tener solucionado el plan para mañana, salimos en busca de un banco porque nos hemos quedado sin dinero.
Por la zona del hotel hay varios restaurantes y entramos a uno a cenar. Después nos acercamos a la zona del Lago Banyan y encontramos un camino que lo bordea con bonita iluminación.



El día ha sido bastante pesado y estamos cansados, no llegamos a ver las dos Pagodas famosas en la ciudad, pero preferimos dar la vuelta y dejarlo para pasado mañana que tendremos la tarde libre.

DÍA 13: FENGHUANG.

Desde muy temprano nos despierta el sonido de una flauta, y es que justo debajo del hotel hay un puestecito donde venden instrumentos artesanos y la dueña llama la atención de los viandantes para que compren.

El desayuno lo tenemos en un restaurante cercano, en recepción nos dan una tarjeta que mostramos en el restaurante y podemos desayunar sin problema todo tipo de comida china.

Sobre las 9:00 horas estamos preparados a visitar Fenghuang, sus gentes y costumbres seguro no nos dejarán indiferentes.

Lo primero que nos llama la atención es una anciana que anoche cuando volvíamos al hotel estaba en su puestecito callejero haciendo abalorios con la luz de un flexo para hoy desde primera hora de la mañana estar vendiendo su mercancía, imaginamos que es su única forma de vida.

Fenghuang es una ciudad de belleza poética, pasear por sus calles es hacer un viaje al interior de la antigua China. Se trata de una de las ciudades más bonitas del país, una ciudad antigua que ha sabido conservar su aspecto original a pesar del paso del tiempo y eso le ha llevado a ser Patrimonio de la Humanidad desde el año 2008.





Vamos hasta el Hong Bridge donde paseábamos anoche para tener la bonita perspectiva del río Tuo . El río Tuo divide la ciudad en dos y en él se ven reflejadas las casas levantadas sobre pilotes de madera (casas típicas construidas por la etnia Miao).



El río es la principal vía para recorrer la ciudad ya que el casco histórico está emplazado en sus dos orillas. La orilla este linda con la zona más moderna de la ciudad, mientras que la orilla oeste es dónde encontramos las callejuelas y la muralla.
La unión entre ambas orillas son sus bonitos y llamativos puentes, y a esto vamos a dedicar parte del día, a ir recorriendo el río por ambas orillas y disfrutar de las vistas en cada puente.



Las casas típicas que dan al río se han rehabilitado y transformado en hoteles y restaurantes para el disfrute de los turistas.




Ha sido un acierto caminar por este lado del río, apenas hay turistas. Las casas y los puentes reflejados en el  agua y sus colores verdosos nos encantan. Aquí la ciudad respira una calma total.




Decidimos cruzar a la otra orilla y regresar poco a poco hasta el Hong Bridge para ir a descubrir la otra parte de la ciudad donde las callejuelas se llenan de bullicio.





Ya situados en la otra parte de la ciudad nos vamos en busca de la Muralla  y nos volvemos a encontrar con el río Tuo, con mucha más animación que lo visto hasta ahora.

Aquí vemos varias pasarelas sobre el río que hacen las delicias de locales y turistas fotografiándose con trajes típicos, y no es para menos, el enclave es precioso ...




Las casitas están mucho más preparadas para el turismo y la diversión nocturna, sin duda esta parte norte de la ciudad es más turística.



El acceso a la muralla está todo en obras pero finalmente llegamos a una de las puertas y subimos para tener una perspectiva diferente de la ciudad, por una parte el río con turistas y por la otra, la vida cotidiana de los locales.






En el centro histórico encontramos museos y mansiones que se pueden visitar pagando por separado o sacando una entrada global, pero nosotros no lo compramos porque queríamos pasear sin rumbo visitando la ciudad a nuestro aire y sin plano.

Llegamos a la gran plaza del Phoenix situada junto a una puerta de la muralla donde la gente local se reúne para hacer bailes y gimnasia. Nos sentamos a observar y parece que el tiempo se detiene y la paz se apodera de nosotros ...





Con bastante hambre regresamos al bullicio de las callejuelas en busca de un restaurante o puesto callejero donde poder comer.




Después de mucho caminar decidimos volver a lo que creemos es el principal atractivo de Fenghuang, el río Tui.

Comienza a atardecer y el río se transforma en una pasarela donde la gente posa y busca la mejor foto y parece que hoy es un día ideal porque la puesta de sol está muy bonita.





Por supuesto que nosotros también nos hicimos cientos de fotos, pero no sólo para nuestra cámara, sino para la de un grupo de chinos que nos captaron en toda posición y movimiento, les debimos hacer gracia por ser occidentales !!!



Ya anochecido nos vamos hacia el hotel para descansar un poco antes de salir a cenar y dar el último paseo nocturno por esta bonita y pintoresca ciudad.
Y es que si fotogénica es por el día, en cuanto llega la noche, el río se convierte en un espejo de luces que no deja indiferente a nadie.







Sin duda hoy ha sido un precioso día para recordar siempre.

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